domingo, 18 de marzo de 2018

Los pilares de la Tierra

El rey Henry tiene un único hijo, el cuál muere en el naufragio del Navío Blanco. Tras ese trágico accidente, en la plaza del pueblo muere un extranjero que tenía una maldición de una mujer embarazada la cuál desaparece sin ningún motivo.

Tras unos años, la familia de Tom, compuesta con Agnes, su mujer embarazada, Alfred su hijo mayor y su hija pequeña Martha, deciden salir de allí para buscar una nueva vida porque a Tom lo habían despedido de su trabajo, constructor.

En su viaje en busca de una vida mejor la mala suerte les acompaña, pierden toda la comida y unos ladrones les agreden. Sin nada que hacer ni sitio a donde ir, conocen a Ellen y a su hijo Jack, una madre y un hijo bastante peculiares. Ellen ayuda a la familia dándole comida pero no por mucho tiempo ya que a Agnes no le transmite muy buena confianza. Agnes decide marcharse ya que no se siente cómoda viendo como Ellen es atraída por Tom. En su huída, da a luz de su bebé pero muere en el parto. Antes de morir le dice a Tom que construya una catedral para ella y al bebé recién nacido lo llevan a un monasterio para que lo cuiden y Tom decide tomar a Ellen como su esposa.

Tras un largo viaje con su nueva familia, llegan al castillo del conde Bartholomew, padre de Alinea. Contrata a Tom y toda su familia se asienta allí. Jack, el hijo mayor, se enamora locamente de Aliena. Tras un tiempo allí deciden huir, ya que se enteran de un posible enfrentamiento con el rey. La familia huye y por fin Tom decide construir la catedral que le pidió su mujer. A Tom le meten en la cárcel por prender fuego a una Iglesia, pero sus hijos le ayudan a escapar.

En un guerra en Kingbridge, Tom muere y ocupa su cargo su hijo Alfred. En la inauguración de la catedral, esta se desploma. Aliena huye a Santiago de Compostela para encontrar a Jack y para su sorpresa, encuentra a Jack construyendo la catedral que le encargó su madre. Aliena le cuenta todo lo sucedido y Jack decide volver para ayudarla. Para evitar problemas, amurallan la ciudad de Kingbridge mientras construyen de nuevo la catedral.

Pasaron las guerras y Kingbridge volvió a la normalidad y la catedral quedó construida.

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