jueves, 14 de diciembre de 2017

EXCURSIÓN A MEDINA-AZAHARA

El martes 21 de Noviembre, los tres segundos de ESO nos dirigimos a Medina-Azahara. Cogimos un autobús a las 8:30 de la mañana y una vez allí entramos en el museo. Mi grupo entró primero en la sala de exposición, donde se encuentran piezas, escritos, la historia de Medina-Azahara, etc. Después íbamos a entrar en el auditorio para ver un vídeo explicativo sobre la ciudad. En último lugar, fuimos a la zona donde se encontraban los almacenes, allí guardaban las piezas que se tenían que restaurar.
Cuando terminamos de ver el museo cogimos otro autobús que nos llevó hasta la ciudad de Medina-Azahara. Allí nos dividimos en tres grupos: 2A, 2B Y 2C. Nada más entrar en la ciudad, lo primero que se ve es una muralla y la Puerta Norte, que se usaba como sistema defensivo. Tras esto nos dirigimos a la zona de trabajo y residencia de la ciudad. Una calle en rampa separaba dos partes, ambas con patios centrales, letrinas, alcobas, pilas y cocina.
Luego vimos el cuerpo de guardia que era una zona de paso, privada, ya que cerca residía el alcázar y ahí se colocaba la guardia para descansar y estar alerta en caso de peligro.
Nos encontramos con la casa del Ya´far, lo que queda de ella es una gran puerta con una decoración vegetal muy elaborada. Tras pasar de nuevo por el cuerpo de guardia llegamos al Edificio Basilical Superior, el cual, no tiene ningún tipo de decoración vegetal.

Al final vimos el Pórtico Este, donde se colocaba el califa para ver  las tropas que llegaban. Este Pórtico tenía 14 arcos pero actualmente tiene 4. Por último vimos la Mezquita Aljama, que está situada fuera del recinto y orientada hacia la Meca.

Con esta excursión he aprendido como vivían en esta peculiar ciudad y los objetos que utilizaban para facilitar su vida diaria.



EL MÉDICO

Rob, un joven de unos doce años, vivía con sus hermanos pequeños y su madre en un pueblecito de Inglaterra. Una mañana llegó al pueblo un barbero con su carromato. Se colocaba en la plaza del pueblo y empezaba a contar algunas de sus anécdotas curando a la gente. Todo el mundo alucinaba con sus historias, ya que, había sanado a mucha gente de enfermedades. Algunos valientes se ofrecieron para curarse y así sucedió. Cada persona que entraba en su carromato salía bien, sin ninguna molestia. Los cristianos radicales, decían que eso era brujería por lo que decidieron echarlo del pueblo. La noche antes de irse, la madre de Rob enfermó y acudió al barbero para que la salvara. Cuando llegó se encontró con los miembros de la Iglesia y su madre muerta, por lo que, no pudo hacer nada. Los dos hermanos de Rob, al ser más pequeños, los adoptaron pero Rob ya era mayor y no hicieron nada por él. Decidió irse con el barbero, ya que sentía curiosidad por todo el mundo de la medicina y quería investigar la enfermedad del costado, la que mató a su madre. En el largo viaje que emprendieron, el viejo barbero sufrió cataratas y acudieron a unos médicos judíos, los únicos capaces de curarlo. Durante su estancia con los judíos, Rob, empezó a interesarse por la cultura judía y el médico que curó al barbero, llamado Cole, le enseñó un mapa del mundo y le habló de Ibn Sina, el cual enseña medicina en Isfahán. Rob quiso aprender del maestro por lo que se dispuso a emprender un largo viaje de un año hasta la Madrasa de Isfahán para que Ibn Sina le enseñara todo lo que sabía. Para emprender su camino tuvo que cambiarse de nombre, se puso Jesse, y, también tuvo que practicarse la circuncisión para ocultar que era cristiano. En su largo viaje conoce a Rebecca, una chica con la que va casarse más adelante. Una vez en Isfahán, Ibn Sina le enseña la medina científica y la filosofía de Aristóteles a Rob. Rob era un gran aprendiz, tenía mucho conocimiento.
Un día la población de Isfahán sufre un brote de peste negra, la cual hace que mueran cientos de personas al día. Los médicos de la Madrasa intentaban curar a todos los afectados posibles, pero no podían con todos. Rob se dio cuenta de que la peste negra era provocada por las ratas que convivían con ellos por lo que las exterminaron. Una vez liberados de la peste negra, Rob se encuentra con Rebecca, él pensaba que había muerto en la tormenta de arena que sufrieron. A la mañana siguiente Rebecca se casó pero lo que ella no sabía es que estaba embarazada y que el padre no era su marido, si no, Rob. La acusaron de adulterio y como Rob estaba enamorado de ella, para que no la matasen, acudió al Sha de Isfahán para que la salvara. Una vez todo normalizado, Rob siente curiosidad por abrir un cuerpo y explorarle para estudiar lo que mató a su madre. Abrir un cuerpo muerto era traicionar a Dios así que lo hizo en secreto. Averiguó lo que le pasó a su madre pero por desgracia le descubrieron el cuerpo abierto y decidieron echar de Isfahán a Rob, Ibn Sina y a todos los judíos. Los musulmanes quemaron la Madrasa y con ella también a Ibn Sina y le pide a Ron que enseñe todo lo que sabe. Finalmente regresa a Londres junto a Rebecca y abren juntos un hospital para refugiar y curar enfermos, en vez de aislarlos y darlos por muertos.

martes, 12 de diciembre de 2017

EL MENSAJERO DEL CALIFA

Después de un largo viaje desde El Cairo hasta la ciudad musulmana de Córdoba para entregarle un mensaje al califa, al fin llegué. Estaba agotado y como recompensa por mi largo viaje, me invitaron al palacio de campo, al otro lado del río. Pasé allí la noche y cuando amaneció fui a los baños públicos para  llegar bien aseado a la recepción con el califa. También visité el zoco de la bella ciudad musulmana y aprovechando mi visita, me compré unas sandalias nuevas. Cuando terminé, me dirigí al alcázar para entregarle el mensaje al califa. Una vez entregado el mensaje,  fui a la mezquita aljama para orar. Después de terminar el rezo me dirigí a las tenerías para teñir unas pieles desgastadas.
Por fin terminé el largo viaje en la bella ciudad de Córdoba, ahora me toca emprender de nuevo el largo recorrido hasta El Cairo.